Con unos ingresos globales de aproximadamente 900 millones de euros, y con presencia en más de 90 países, somos plenamente conscientes de que los desafíos de Oxfam son tanto operativos como estratégicos. Las enormes disparidades culturales y de los entornos suponen un desafío para las formas convencionales de trabajo; nos exigen enfoques más adaptados al contexto para combatir el riesgo de fraude y corrupción.
Nuestra prioridad estratégica es generar en la confederación una mejor resiliencia ante el fraude, al tiempo que integramos los valores comunes de Oxfam: inclusión, empoderamiento y transparencia.
Nuestra postura
Oxfam no tolera el fraude ni la corrupción, y se ha comprometido a garantizar que sus sistemas, procedimientos y prácticas reducen el riesgo de que ocurra al mínimo absoluto. La formulación "reducir al mínimo absoluto el riesgo de fraude y corrupción" transmite con gran precisión nuestra determinación de abordar este problema de manera proactiva e incansable.
Una confederación, un mismo enfoque
Somos conscientes de que conseguir plantar cara al fraude y la corrupción depende de más de un área y de más de un nivel de la organización. Por consiguiente, nos comprometemos a aplicar una estrategia holística contra el fraude y la corrupción. Esta estará integrada en todos los niveles, desde proyectos y divisiones a países, regiones y organizaciones afiliadas, y todos la apoyarán. Esta postura guarda coherencia con nuestro código de conducta y nuestros valores.
Nuestra política contra el fraude y la corrupción
En nuestro nuevo informe de integridad, desde Oxfam hacemos públicos por primera vez nuestros datos unificados sobre casos de fraude y corrupción. Tanto en la esfera pública como a nivel interno de Oxfam, este informe nos ayudará a hacer un seguimiento de nuestros progresos en la puesta en práctica de los valores y compromisos de nuestra organización, con el fin de mejorar la forma en la que fomentamos un espacio seguro e inclusivo para las personas a quienes servimos, así como para nuestro personal, nuestras organizaciones socias y otras partes interesadas.
Denunciar una conducta ilícita
Si un/a miembro del personal, el voluntariado, una organización socia, una empresa de consultoría o un proveedor sospecha que se haya dado, o vaya a darse, una conducta ilícita, le animamos a transmitir sus sospechas sin miedo a represalias y sabiendo que se le protegerá frente a la victimización o el despido. Todas las denuncias son confidenciales y solo se compartirá información de las mismas con las y los miembros pertinentes del equipo. Las personas denunciantes/supervivientes podrán preservar su anonimato.
Las conductas ilícitas relativas a la salvaguardia, los recursos humanos y el fraude y la corrupción pueden denunciarse en línea o por correo electrónico.